En San Agustín, Morelia, llega al portal de San Agustín, una maestra que se instala con su máquina de escribir y un letrero anunciando "Se dan clases de primaria", por 30 pesos. La mujer cuenta que, a una cuadra de los portales, hay una primaria, y eran esos alumnos quienes acudían a sus clases, pero a raíz de la pandemia y la suspensión de clases, la afluencia de gente es nula.